domingo, 14 de febrero de 2016

El expediente de Pérez-Clotet, en el Archivo Histórico Provincial de Cádiz

Villaluenga del Rosario
Por Pedro Pérez Clotet
Todas las imágenes y los documentos de esta entrada son propiedad del Archivo Histórico Provincial de Cádiz.


Por Esperanza Cabello


Nuestro amigo Santiago Saborido Piñero, técnico del Archivo Histórico Provincial de Cádiz, nos ha comunicado una publicación muy interesante relacionada con Villaluenga y, más concretamente, con Pedro Pérez-Clotet.





Se trata del expediente en el que el poeta solicitaba un cambio en sus apellidos, uniendo el de su padre y el de su madre con un guión para que perduraran no solo en él sino en sus descendientes.
La instancia que comienza el expediente dice así (hemos mantenido la ortografía de mediados del siglo XX, además de la propia de Pérez-Clotet):

Señor Juez de Primera Instancia é Instrucción de este Partido.
Grazalema
PEDRO PÉREZ CLOTET, hijo de José y de Rosario, mayor de esas, casado, natural de esta villa de VILLALUENGA DEL ROSARIO (Cádiz). Doctor en Derecho, con domicilio y residencia en esta misma villa, calle General Franco, 19, con la debida consideración á V.S.
EXPONE:
Que en todas ó mayor parte de sus relaciones sociales, se le denomina y conoce por Pérez-Clotet, en el sentido  de un solo apellido, costumbre que tuvo  sus principios en los medios universitarios, y que posteriormente se viene generalizando en la mayoría de sus relaciones sociales, especialmente en las que en los medios literarios se desenvuelve el que suscribe, tanto nacionales como extranjeros.
Que en parte comprueban esta generalidad, las fajas y sobres de correspondencia que se unen, unos oficiales, y particulares otros, así como la adjunta declaración jurada, en la que se recoje (sic) nota de varias obras de significado valor cultural y literario, en las que aparecen unidos los apellidos  Pérez-Clotet, y á más, en el uso y denominación general, propio de sus relaciones.
Por todo ello, y vistos los artículos 70 al 74 del Reglamento para la ejecución de la Ley de Registro Civil de 13 de Diciembre de 1,870, y Decreto del Ministerio de Justicia de 3 de Mayo de 1935, á  V.S., con el mayor respeto,
SUPLICA:
Se le conceda al recurrente el derecho á utilizar para sí, y su descendencia, el  de adicción de sus dos apellidos (paterno, Pérez y materno, Clotet), formando uno solo de PÉREZ-CLOTET, para lo cual, se sirva tener por presentada esta solicitud con los documentos referidos y certificaciones de nacimiento que se le unen, se incoe y tramite el oportuno expediente de acuerdo con las mentadas disposiciones, con elevación en su día al Iltrmo. Sr. Director General del Registro y del Notariado, para la propuesta y resolución correspondiente.
Es gracia que por ser de justicia espera obtener de V.S. cuya vida guarde Dios muchos años.
VILLALUENGA DEL ROSARIO para Grazalema, á veinticuatro de Marzo de mil novecientos cuarenta y siete.


Declaración Jurada de Pérez-Clotet en la que explica cómo sus apellidos aparecen unidos en diversas publicaciones, tanto en España como en el extranjero. 

 



Continúa la declaración jurada, explicando que también utiliza el doble apellido para artículos publicados y en las dedicatorias manuscritas de sus obras.





Este cuarto documento es una "partida de nacimiento" de Pérez-Clotet. El Archivo Municipal y el Archivo Parroquial fueron quemados en Villaluenga (no sabemos exactamente cuándo) y, falto de certificación documental, el juez de paz don José Zapata, expidió un certificado basándose en el testimonio de dos testigos de 77 y 78 años.


Don José Zapata Garrón, Juez de Paz y encargado del Registro Civil de esta Villa
CERTIFICO: Que habiendo sido destruido e incendiado el Archivo y Registro Civil de este Juzgado de Paz é incluso el Archivo Parroquial de esta villa durante la dominación marxista en este pueblo y presentados en este mi juzgado los testigos Don Antonio Ruiz Gil, natural de Grazalema y vecino de esta villa, de 78 años de edad, profesión, campo, estado casado, con domicilio en calle Los Mártires, nº 9  Don Francisco Pérez Barea, de 77 años de edad natural y vecino de esta Villa, profesión corcho taponero, estado Viudo, con domicilio en calle Balmes, nº 2; Declaran y hacen constar que Pedro Pérez Clotet, hijo de José y de Rosario, nació en esta Villa el trece de Diciembre de mil novecientos dos, siendo nieto por línea paterna de Don Pedro Pérez Barea y de Doña Catalina Ruiz Barea y por línea materna de Don Antonio Clotet Laínez y de Doña Teresa de Castro.
                Y para que conste expido el presente que firman los testigos y el Secretario actuante en Villaluenga del Rosario (Cádiz), a catorce de Diciembre de mil novecientos cuarenta y seis.
(Firmas del Juez, los testigos y el Secretario)
 





 (...)
El Ministro de Justicia, a propuesta de esta Dirección General, ha tenido a bien acceder a lo solicitado y autorizar a Don Pedro Pérez Clotet, así como a sus descendientes legítimos, para usar como uno solo y primero el apellido PÉREZ-CLOTET, imponiendo al solicitante como segundo el que ocupa el mismo lugar entre los de su padre y conservando los descendientes, como segundo, el que tienen en la actualidad, no debiendo producir esta autorización efectos legales hasta que la presente orden sea anotada al margen de las actas de nacimiento de los interesados, conforma a lo prevenido por el Art. 74 del citado Reglamento.




 La autorización fue cursada el 12 de marzo de 1949, y llegó al Juez de Primera Instancia de Grazalema el 17 de marzo del mismo año.


 Anexo: correspondencia enviada  a Pedro Pérez-Clotet en la que se observa claramente cómo los dos apellidos del poeta de Villaluenga estaban ya unidos con un guión.




Agradecemos al Archivo Histórico Provincial de Cádiz su gentileza al  permitirnos hacer esta publicación.

jueves, 7 de enero de 2016

La música en Villaluenga del Rosario: el gramófono

Niños oyendo música

Revista Mundo Gráfico, julio de 1934
Hemeroteca Digital (BNE)
Por Esperanza Cabello
Hemos hablado en algunas ocasiones de las Misiones Pedagógicas que tuvieron lugar en la primera mitad del siglo pasado. Imaginamos que el profesor Gálvez tendrían mucho que ver en que a Villaluenga llegaran libros, enseñanzas, música y cultura en general.
Reproducimos a continuación varios párrafos de la revista "Mundo Gráfico", se trata de un artículo en el que explica la necesidad de llevar música a los pueblos más alejados y cómo los maestros se encargan de los gramófonos. Realmente curioso.



MUNDO GRÁFICO 4 DE JULIO DE 1934

Las Misiones Pedagógicas

A estos pueblos humildes e ignorados, perdidos en los llanos o en las montañas de España, llega ahora por primera vez el gramófono: con él llega la música española y extranjera, e tesoro de armonías que estos pueblos, hundidos en una ignorancia de siglos, van a escuchar con un asombro maravilloso.

Revista Mundo Gráfico, julio de 1934
Hemeroteca Digital (BNE)




La Música en los pueblos de  la España Ignorada

“Cantando la pena, la pena se olvida” Escribió Manuel Machado. Eso ha dicho el arte, y el pueblo, por otro lado, ha dicho que “quien canta, su mal espanta”. De donde arte y pueblo, poesía creada y saber popular, vienen a decir la misma cosa, que el cantar disuelve el dolor, lo borra, lo anula. Cantando, lanzando al aire la pena propia, el espíritu se descarga de su peso de melancolías y zozobras. El ánimo está más ligero, y la frente, más despejada. Cantar es alegrarse, es depurarse. (…)

Acojamos,  por ello, con fervor, la iniciativa de llevar música a los pueblos olvidados. Lo están haciendo las Misiones Pedagógicas, y aunque esta tarea es, en cuanto a la extensión, sólo una parte mínima de lo que había que hacer, merece la adhesión de cuantos creen que la música torna sensibles a las gentes y que el problema de España es un problema de sensibilidad.

Revista Mundo Gráfico, julio de 1934
Hemeroteca Digital (BNE)


UN GRAMÓFONO Y UNA COLECCIÓN DE DISCOS

¿Cómo llevan las Misiones Pedagógicas la música a esos escondidos rincones de nuestro suelo? Por una parte, el Coro de Misiones –lo forman estudiantes- interpreta las canciones y los romances creados por el pueblo, y ya, en realidad, olvidados bajo el influjo nivelador de la vida actual.

Pero además las Misiones hacen una gran siembra musical con el gramófono. Así, en algunos pueblos, la Misión deja, con la biblioteca, un gramófono y una colección de discos. Libros y música quedan allí, surco de arte y de emoción, en el que algún día cuajará la semilla de una nueva sensibilidad. (…)

El Patronato de las Misiones Pedagógicas tiene en su servicio treinta y ocho gramófonos, confiados a maestros nacionales y a otras personas, en pueblecitos apartados. He aquí algunos de estos pueblos:

La Baña, Pombriego, Soto de Valdeón, en León; Burgohondo, en Ávila; Bahabón de Esgueva, Milagros, Treviño, en Burgos; Navalcán, en Toledo; Campillo de Ranas, Condemios de Abajo, Valdepeñas de la Sierra, en Guadalajara; Ayllón, Fuentepelayo, La Cuesta, Vegas de Matute, en Segovia; Alameda del Valle, Aoslos, Horcajo de la Sierra, Montejo de la Sierra, en Madrid; Navas del Madroño, en Cáceres; Villaluenga del Rosario, en Cádiz…